A menudo nuestro bebé padece de cólicos en sus primeros meses de vida, pero también puede ir estreñido, o tener gases, y muchas más molestias digestivas que pueden estar presente durante la lactancia y su desarrollo.
Sea cual sea la causa del problema digestivo, el osteópata te ayuda con sus conocimiento y las tensiones que es capaz de percibir con sus manos, y que son la causa que la función digestiva se vea afectada.
Más allá de lo que come y lacta tu bebé es importante como osteópata detectar las tensiones que procesos y vivencias durante tu embarazo, parto y primeros años de vida pueden estar afectando a su cuerpo.
El Osteópata ve el cuerpo como un conjunto por lo que molestias digestivas pueden también tener su origen en otras partes, en especial su sistema nervioso, es por eso que el trabajo craneal, sacro y en su columna a menudo resuelve este problema.
Pero además, estructuras corporales como el diafragma, el hígado o las fascias digestivas pueden ser las causas del malestar digestivo que ves en tu bebé, y muy a menudo después de las comidas o cuando se va a dormir.
Franki Rocher
Osteópata D.O