A menudo, cuando pensamos en qué nos causa las molestias digestivas, siempre pensamos en qué estamos comiendo, pero ya desde hace tiempo, me encuentro con que la principal causa de las molestias digestivas digestivas la pasamos por alto: el ESTRÉS!
Como osteópata que con mis manos tocan la anatomía del cuerpo no puedo pasar por alto cómo nuestras emociones y el estrés alteran mi sistema nervioso y en consecuencia mi sistema digestivo. Puede que estemos pasando por alto la principal causa de enfermedad, el desequilibrio del sistema nervioso autónomo. Porque vivimos en un mundo en alerta continua, donde el sistema nervioso parasimpático que gobierna nuestro descanso y al mismo tiempo, la movilidad de mi sistema digestivo, está frecuentemente impedido en su función.
Es entonces cuando como osteópata me ocupo de liberar las tensiones que aparecen en mi cráneo, en especial en la base craneal, donde el nervio que lo gobierno todo, el nervio vago está ubicado. Si él esta libre y puede trabajar podré sentir la movilidad de mi sistema digestivo, y también mi respiratorio. Es gracias a él, que digerimos la comida, hacemos la digestión, secretamos jugos digestivos entre las principales funciones. En definitiva, si no descansamos, nuestro sistema digestivo no trabaja, y si no trabaja es entonces cuando poco a poco irán viniendo las molestas y con el tiempo las enfermedades.
Permitir que el sistema digestivo pueda moverse de forma natural,
Solo cuando mis vísceras y órganos digestivos pueden moverse de forma natural es cuando mi salud digestiva se expresará sin obstáculos.